La principal fuente de calor externa es la radiación solar.
Esta depende de la hora del día y de la
presencia o no de sombras externas producidas por otras
edificaciones, árboles o estructuras de la construcción como techos salientes, aleros y aletas; así como de la
orientación de las paredes y la latitud "qué tan cerca o lejos estamos del ecuador".
En Centroamérica, las paredes este y oeste reciben mucha
intensidad solar y la sur está expuesta la
mayor parte del tiempo. Cuartos fríos ubicados en el
exterior deberían contar con un techo para generar sombra o estar pintados de colores claros o reflectivos.
La reducción de calor externo se realiza mediante el
aislamiento de las superficies. Generalmente, los
cuartos de media temperatura poseen 4” (10.2 cm) de
poliestireno en paredes y de 4 a 6 pulgadas (10.2 a 15.2 cm) en los techos y pisos. Los de baja temperatura
poseen iguales dimensiones, pero el aislante es poliuretano expandido.
Dentro de las especificaciones del aislamiento térmico que
se deben cumplir para su utilización en instalaciones frigoríficas se encuentran:
1. Tener baja conductividad térmica.
2. Ser muy poco higroscópico.
3. Ser resistente a los roedores.
4. Ausencia de olores.
5. No ser combustible.
6. Ser neutro químicamente frente a otros materiales
utilizados.
7. Ser plástico.
8. Tener facilidad de colocación.
9. Tener resistencia a la compresión y a la tracción.
Ademas, el diseño del espesor óptimo del aislamiento
es de gran importancia, ya que a medida de que los precios de la energía se incrementen, se
requerirán mayores espesores de aislamiento en las instalaciones frigoríficas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario